Nuestras costumbres son tan especiales y bellas. La forma de hablar que nos caracteriza, no solo por el dulce idioma guaraní, sino también por el jopará y las expresiones que solo nosotros entendemos. “Miti miti”, “ma'ena” y el “así gua'u” son solo algunas de las frases que cuando un extranjero pregunta qué significan, resulta difícil explicarlas, pues al traducirlas textualmente no tienen el mismo sentido.
También costará hallar naciones en donde los asadachos con "los perros" surjan tan fácilmente, luego de cada partido de fútbol o vóleibol.
El paraguayo tiene la costumbre de saludar con el “jaha pues”, aunque esta no sea una invitación a que lo acompañen. O, a veces, si se detiene a charlar, inicia la conversación con el: “Haupéi, mba'e teko pio?”, a lo que el otro contesta: “Tranquilopa”; esa siempre será la respuesta, aunque no sea del todo cierta.
Por otro lado, también tenemos la cordialidad que nos identifica –la forma en que recibimos a los visitantes, con mucha amabilidad y hospitalidad–, sin duda es lo que más destacan los extranjeros luego de venir al país. Teniendo en cuenta tan bellas costumbres, tradiciones y peculiaridades, no cometas el error de decir que te avergüenza ser paraguayo.
Por Ana J. Lezcano (19 años)
El paraguayo tiene la costumbre de saludar con el “jaha pues”, aunque esta no sea una invitación a que lo acompañen. O, a veces, si se detiene a charlar, inicia la conversación con el: “Haupéi, mba'e teko pio?”, a lo que el otro contesta: “Tranquilopa”; esa siempre será la respuesta, aunque no sea del todo cierta.
Por otro lado, también tenemos la cordialidad que nos identifica –la forma en que recibimos a los visitantes, con mucha amabilidad y hospitalidad–, sin duda es lo que más destacan los extranjeros luego de venir al país. Teniendo en cuenta tan bellas costumbres, tradiciones y peculiaridades, no cometas el error de decir que te avergüenza ser paraguayo.
Por Ana J. Lezcano (19 años)
Fuente: ABC